El Jesús de la fe, es un personaje real para millones de creyentes, nacido de una virgen real, vivió realmente repartiendo paz y amor, murió de forma real en la cruz por culpa de los judíos, y resucito de forma real.
Para los intelectuales del cristianismo ha sido fácil y rentable transmitir la figura de un Jesús domesticado y manso. Sin embargo, lo mas sobresaliente fue crear un personaje sobrehumano.
Investigadores como Piñero, Pikaza, Ariel Álvarez, José Monserrat, Bermejo, Bultman, Loisi, Aslan, P. Rodríguez, Eslava Galán, Hanks, Crossan, Xhaufflaire, Guignebert, etc... han conseguido con matices y sus propias narrativas intelectuales, poner en entredicho a los historiadores confesionales. Todas las Iglesias cristianas, así como denominaciones de sectas creyentes en el Jesús del Nuevo Testamento, han coincidido siempre en asegurar que el Jesús histórico es el reflejado en los evangelios.
No es necesario ser ate@ o agnóstic@ para leer, informarse, investigar y una vez con más datos descubiertos, llegar a concluir de forma diametralmente opuesta a los postulados de las Instituciones eclesiásticas durante dos milenios.
Si continúas leyendo los capítulos que seguirán a este, descubrirás a un Galileo llamado Jesús.
Hasta la próxima,
Jose Sombrero 😉